Hoy mi tarde noche viene jalonada por una duda, no se si muy metódica o mas bien cotidiana: ¿entro en el chat o me autogestiono la tarde-noche de otra manera? (Y si es así.. ¿cómo?). Creo que os voy a compartir un listado de pros y contras. No se, es como reflexionar en voz alta. Lo bueno del chat es que una charla con gente diferente, vete tu a saber con quien, que te dice lo primero que se le ocurre. Bueno, te puedes hacer cierta idea de por donde va alguna gente, y sorprenderte también. Una de las cosas malas es que me parece que tiene en muchos casos un matiz de pérdida de tiempo escapista para no conocerse una mas a si misma. Como si yo misma me aburriera y buscara entretenimiento, distracción.
Mi experiencia vital de pasar mucho tiempo sola es que cuando se llega al borde del hastío, al borde del agobio, al borde del profundo malestar del no-me-aguanto y se mantiene firme el timón, sin huir ni escapar a todo correr en la dirección de cualquiera, del primero que una encuentre, digo, cuando una permanece fiel a si misma, al otro lado del recodo se encuentra un gran regalo de autoestima. No es sencillo. Pero tampoco es perder el tiempo. Por el contrario, es encontrar la misma esencia de una, es convivir con alguien con quien estamos las veinticuatro horas y que tantas veces nos defrauda o no nos gusta.
Y este permanecer presente y vigil tiene otro gran regalo: la autenticidad. Cuando una busca a los demás como quien busca una muleta o un parche no esta transitando hacia el otro con auténticas ganas de compartir, sino con la angustia de la huida, con una voluntad pocha y amuermada que todo lo encenaga.
Este permanecer firme al timón no está exento de tentaciones. Bajar la guardia y dejarse llevar por la vagancia o por la debilidad es muy sencillo, lo más socorrido. Llevo dos horas paseando a los márgenes de mi flojera, que me incita a meterme al chat. Blablabli, blablabla, pasas el rato, no sacas nada en limpio pero te entretienes. Como poner la tele a ver qué dan. La tele ya no la pongo por poner, me he desenganchado. Pero con el chat todavía tengo conatos de "me agobio, venga, voy a ver que cuenta el primero que me encuentre" cuando se perfectamente que cuando una se agobia es el momento de echar el freno de mano y ser creativa y buscar y buscar el camino que me pueda llevar a aprovechar el tiempo, a que éste fructifique, a llevar una vida plena.
Hay momentos para estar sola y momentos para estar con gente. No descarto el chat, como no descarto la televisión. Pero quiero salir al mundo con una dirección, con una intención y con las manos llenas. Ir dando tumbos entre conversaciones en las que no me interese el interlocutor y simplemente lo utilice para mis fines no me parece ético.
Luego hay otro matiz que no esta de mas tener en cuenta: cuando entro al chat solo me abordan hombres, y las mujeres con las que he intentado hablar, la practica totalidad no tenia interés en hablar conmigo al darse cuenta que yo era mujer.
Entre esta linea y la inmediatamente anterior dista una conversación telefónica muy agradable y provechosa. Al final me he decidido por hablar con alguien a quien aprecio y conozco, no a desparramar mi atención y mi tiempo con el primero que me encuentre. Después de un cómputo general al que le pongo una nota altísima, ahora estoy ya cansada, es tarde y quizas me vaya a dormir. Sea como sea, un dia bonito y bien aprovechado, con un gran final.